Por una inusual tormenta declaran el estado de emergencia en Alaska

El gobernador del estado de Alaska, Mike Dunleavy, declaro el estado de emergencia por lo que podria ser la peor tormenta en 50 años, que causo la inundacion de varias areas costeras.

Argentina 18 de septiembre de 2022 Agencia Télam
El gobernador del estado de Alaska, Mike Dunleavy, declaró el estado de emergencia por lo que podría ser la peor tormenta en 50 años, que causó la inundación de varias áreas costeras.
En ese estado del noreste de los Estados Unidos la situación podría empeorar en las próximas horas, con vientos de hasta 144,8 kilómetros por hora, precisó la agencia de noticias ANSA.
La oficina del Servicio Meteorológico Nacional en Fairbanks advirtió que la tormenta podría ser la más fuerte en 50 años.
A causa de este fenómeno climático, las autoridades instaron a las personas no salir de las casas y sobre todo a no aventurarse en las zonas inundadas.
Esta tormenta fue provocada por un frente de baja presión en el Estrecho de Bering que en lugar de traer un clima frío, fue alimentado por el aire volátil del antiguo tifón Merbok, explicaron los meteorólogos.
El resultado fueron lluvias torrenciales a lo largo de la costa al sur de Anchorage este sábado, con una advertencia de inundación vigente para esa costa.
La fuerza del agua movió algunas casas de sus cimientos y una vivienda en Nome flotó río abajo hasta que quedó atrapada en un puente, detalló la cadena de noticias CNBC.
La potente tormenta, lo que queda del tifón Merbok, influyó en los patrones climáticos en lugares tan lejanos como California, donde se esperaban fuertes vientos y una rara tormenta de lluvia a finales del verano.
En Alaska, no se reportaron heridos ni muertos hasta el momento, dijo Jeremy Zidek, portavoz del Departamento de Seguridad Nacional y Manejo de Emergencias.
Las autoridades habían advertido que algunos lugares podrían sufrir las peores inundaciones en 50 años y que las aguas altas podrían tardar hasta 14 horas en retroceder.
Entre los más afectados se encuentra Golovin, un pueblo de unos 170 habitantes que en su mayoría buscaron refugio en una escuela o en tres edificios en una ladera.
Los vientos en el pueblo soplaron a más de 95 kilómetros por hora y el agua se elevó a 3,3 metros por encima de la línea de marea alta normal y se esperaba que subiera otros 60 centímetros hoy antes de llegar a la cima.
Charlie Brown, alcalde de la comunidad tribal de Golovin, dijo que "unas 40 personas fueron desplazadas a terrenos más altos debido a las inundaciones que incluyeron la mitad inferior de la ciudad", reportó la cadena NBC.
En Nome, el sábado por la tarde, el Servicio Meteorológico Nacional señaló que había habido "inundaciones costeras peligrosas" y culpó a "un mar muy embravecido".
En este sentido también se informó sobre inundaciones en Shaktoolik, una pequeña ciudad en la costa del mar de Bering, en donde se registraron múltiples ráfagas de más de 90 kilómetros por hora, y que los expertos calificaron como "huracanadas", en la isla Adak, parte de las Islas Aleutianas.
El clima extremo llevó a Alaska Airlines a cancelar sus vuelos del sábado a Nome y Kotzebue, así como un vuelo matutino a Bethel, dijo la empresa en un comunicado.
El rastreador de vuelos FlightAware dijo que ocho vuelos hacia o desde el Aeropuerto Internacional Ted Stevens Anchorage se cancelaron el sábado y 35 se retrasaron.
El frente, que se movía hacia el norte, representa un fenómeno extraño para los científicos.
"Obtiene su energía de la cálida superficie del mar", dijo el meteorólogo del Servicio Meteorológico Nacional Alan Shriver y remarcó que "este es un evento excepcionalmente raro". (Télam)
Te puede interesar
Populares

Suscríbete al Resumen de Noticias para recibir periódicamente las novedades en tu email