La ruta nacional 34 que conduce a la Reserva de Biosfera de las Yungas, en Jujuy, fue objeto de tareas de saneamiento que permitieron erradicar basurales y malezas que afectaban su calidad paisajística, informó el ministerio de Ambiente de jujuy.

“Se trata de una vía troncal, de mucha relevancia en las Yungas por el tránsito permanente de mercancías y del turismo, por eso se le dio prioridad”, dijo hoy a Télam el gerente general la empresa Girsu S.E.(Gestión integral de Residuos Sólidos Urbanos), Jorge Bouchet.

En ese sentido, se está desarrollando un plan de gestión ambiental de la ruta nacional 34 y zonas adyacentes que contempla además, tareas de fiscalización y control en un área con valores ambientales, culturales y productivos.

“Buscamos sensibilizar sobre la importancia de que el corredor se mantenga limpio todo el año, entendemos que hay un tema cultural de muchos años donde cualquiera hace lo que quiere”, expresó.

Las tareas de limpieza y desmalezamiento se realizaron desde San Pedro hasta Calilegua con maquinarias de Vialidad Nacional, a la par de las acciones del ministerio de Ambiente que se ocupó del saneamiento en el ingreso a los basurales de Fraile Pintado y de San Pedro, zonas de transición del área protegida.

Todas las semanas se vienen realizado tareas de control y fiscalización, las cuales "permitieron detectar la semana pasada a dos personas cometiendo una infracción, por lo que se les labró actas y ahora está en proceso administrativo", explicó Bouchet.

Según se informó, para un mejor monitoreo se instalarán cámaras de seguridad, mientras que se analiza la posibilidad de implementar un sistema municipal de foto-multas.

“Para estas actividades se tiene previsto sumar a los municipios de la zona ya que hay gente que sigue contaminando”, dijo.

La calidad paisajística en el ingreso a la Reserva de Biosfera de las Yungas -declarada a nivel internacional por la UNESCO en 2002- se vio afectada por el vuelco de basura, el desarrollo de micro basurales, el crecimiento de malezas y otras acciones que repercuten negativamente afectando su gran potencial turístico y diversidad biológica y cultural.

Por eso, con el impulso del ministerio de Ambiente se conformó una mesa multisectorial integrada por instituciones provinciales, nacionales, de la sociedad civil y privadas como la empresa Ledesma y la fundación Proyungas, con el fin de mejorar el estado de la ruta en cuanto a impacto ambiental y social y seguridad vial. (Télam)