El fuego sigue activo pero hay sectores en los que se pudo frenar el avance de las llamas

El gobernador de Neuquén, Omar Gutiérrez, sobrevoló hoy la zona afectada por el incendio forestal en el lote 39 de Quillén, en proximidades de la localidad de Aluminé donde, hasta el momento, son 4 mil las hectáreas de bosque nativo y pinos las afectadas por el fuego y si bien el incendio sigue activo desde que se inició hace dos semanas hay sectores en los que se pudo frenar el avance de las llamas.
Tras sobrevolar la zona, Gutiérrez brindó una conferencia de prensa en el Museo Municipal y Centro de Interpretación El Charrúa, de Aluminé, acompañado por el secretario de Desarrollo Territorial y Ambiente, Jorge Lara; el ministro de Turismo, Sandro Badilla; y el intendente de esa localidad, Gabriel Álamo.
Explicaron que “durante la jornada de ayer y esta mañana, y pese al intenso calor, se pudo operar de forma aérea con cinco helicópteros y tres aviones hidrantes, 145 brigadistas en terreno y maquinaria para ataque terrestre y máquinas cargadoras y topadoras”.
El gobernador dijo que “se pudo ver el trabajo de todo el equipo, los recursos, los helicópteros que están trabajando, los aviones, todo el personal que se sumó de Aluminé, Villa Pehuenia, Junín y San Martín de los Andes, de las provincias patagónicas, también de las provincias de Córdoba y San Luis que generosamente y solidariamente se unieron para trabajar y poder enfrentar este incendio y que ha permitido que se salven cientos y miles de hectáreas”.
Estimó que “el impacto hasta aquí del incendio es de aproximadamente cuatro mil hectáreas, pero eso no significa que estén arrasadas y perdidas las cuatro mil porque dentro de ellas hay lugares en los cuales gracias al esfuerzo y trabajo de los hombres y mujeres se han podido preservar”.
Luego sostuvo que “están en el lugar dando la lucha para poder controlar y monitorear la evolución del incendio, para rodear los distintos focos y que su impacto no haga que crezca la superficie de nuestros bosques dañados y afectados”.
También anunció que “se lanzará un plan de reordenamiento de las implantaciones que requerirá inversión pública, pero la vamos a hacer porque es una prioridad cuidar el medioambiente, y parte de esta madera podrá tener como destino el proceso industrial en aserraderos y también habrá de servir para calefaccionar los hogares”.
En tanto, el secretario de Desarrollo Territorial y Ambiente, Jorge Lara, indicó que “el incendio afectó vegetación nativa de araucarias y ñires y que en los últimos días no aumentó la superficie quemada”.
“Estuvimos sobrevolando el área y evaluando la actividad de los brigadistas que trabajan en terreno”, dijo y señaló que “además de los aviones y helicópteros, “hay brigadas de apoyo que vinieron de otras provincias y de localidades de aquí como Chos Malal, San Martín de los Andes y Moquehue”.
El funcionario neuquino informó que se mantendrán guardias de vigilancia de cenizas durante todo el mes de enero “porque hay muchos puntos calientes”.
En el frente del incendio trabajan 145 brigadistas de las instituciones del Servicio Nacional y Provincial de Manejo del Fuego, brigadistas de Córdoba y San Luis, de la Corporación Forestal de Neuquén (Corfone) y Parques Nacionales.
Además, de estos brigadistas oriundos de Aluminé, Junín de los Andes, San Martín de los Andes, Villa Pehuenia-Moquehue y Chos Malal, también sumaron su esfuerzo comunidades mapuches del Consejo Zonal Pewence.
Las condiciones del clima siguen siendo desfavorables por altas temperaturas, la sequía y el viento. (Télam)