Pacientes que sufrieron síntomas de hantavirus señalaron hoy que el cuadro se inicia con mucho cansancio, fiebre y avanza al punto en que los afectados solo quieren tirarse "a la cama y dormir", por lo cual los médicos epidemiólogos seguían con atención los casos registrados en la zona cordillerana de Chubut porque advirtieron que los afectados pueden sufrir "un estado de letargo muy peligroso".

Asì lo manifestaron en diálogo con Télam algunas personas que padecieron el virus y fuentes médicas que destacaron la importancia de los testeos que se implementan en los hospitales de la zona y los protocolos aplicados a los pacientes.

En ese marco, las autoridades de Salud de Chubut y Río Negro extremaron en las últimas semanas las medidas de seguridad sanitaria ante la facilidad de los contagios y los síntomas severos que aparecieron durante el último brote de hanta en la localidad chubutense de Epuyén, que provocó 10 muertes y 29 infectados, por lo que se implementaron aislamientos obligatorios para quienes hayan tomado contacto con los afectados.

Incluso, el secretario de Salud nacional, Adolfo Rubinstein, manifestó en su reciente visita a la zona que el sistema sanitario se enfrenta "con una propagación inusual, ya que hasta ahora la hipótesis de contagio era ambiental" y ahora "sorprendió la forma de propagación de persona a persona", algo "diferente a la que conocíamos".

Sebastián Valle, de 27 años, quien se infectó de hantavirus en Epuyén y que sufriò la muerte de su padre, Aldo Valle, y sus hermanas, Loreley y Jessica, con pocos días de diferencia, reveló a esta agencia que cuando se inician los síntomas "te sentís tan cansado que no querés hacer nada, tenés fiebre y te sentís mal".

"Lo único que querés es tirarte a la cama y dormir. Te podés morir sin darte cuenta", alertò contó Sebastián.

Al respecto, una especialista indicó que "todavía nos falta aprender mucho sobre el virus, pero estos síntomas demuestran el grado en que penetra en las células del cuerpo generando un estado de letargo muy peligroso porque la persona es incapaz de moverse, se siente totalmente agotada".

El ministro de Gobierno del Chubut, Federico Massoni, se refirió a la situación que se está viviendo en la provincia con los casos de Hantavirus y la medida judicial que determinó el juez penal de Esquel, Martin Zacchino. Dispuso que se torne "obligatorio" el aislamiento de 85 pobladores de Epuyén.

"A través de los profesionales y especialistas del Ministerio de Salud, se va determinando qué vecino puede llegar a tener un peligro potencial y se dictan las precauciones correspondientes, entre las que se encuentra el de permanecer en sus domicilios. Como en algunos casos se ha incumplido, se ha hecho una presentación ante la justicia", reconoció Massoni.

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Según el funcionario, "la medida judicial que se presentó ante fiscalía busca generar una colaboración directa de la ciudadanía en el combate contra el Hantavirus, y nosotros vamos a estar al lado previendo que se den cumplimiento a las normativas que establece el Juez Zacchino pero también colaborando con el vecino que tenga alguna necesidad".

En ese marco, los informantes señalaron a Télam que todo paciente que haya tomado contacto en Epuyén con personas contagiadas o con quienes hubieran estado en contacto con ellos deberá realizar un aislamiento obligatorio de 30 días en su hogar

, de acuerdo a lo decidido esta semana, indicaron las fuentes a Télam.

"No podemos arriesgarnos, el virus se contagia persona a persona y tenemos que proteger a la población", explicó una fuente dedicada a combatir la cadena contagios.

Los médicos epidemiólogos de Río Negro y Chubut comprobaron que en el brote de Epuyén se revelaron en los pacientes preocupantes síntomas de carácter fulminante que hacen más complejo tratar el cuadro.

A los efectos más comunes del contagio, como fiebre, dolor de cabeza, diarrea y dolor general, se sumaron este año pacientes que denunciaron un agotamiento general y retención de orina con posterior falla multiorgánica en cuestión de horas, y los especialistas detectaron que algunos sufrían un proceso de depresión tan agudo que podían llegar a "dejarse morir" sin la adecuada intervención de un experto.

Ese tipo de síntoma fue confirmado a Télam por

El hospital Zonal de Bariloche Ramón Carillo desarrolló el protocolo sanitario de Río Negro, por el cual entre el momento en que una persona hace una consulta por síntomas relacionados con hantavirus y su completo aislamiento transcurren entre 3 y 5 minutos.

Télam pudo comprobarlo a través de este corresponsal, quien regresó de una cobertura en Epuyén realizada entre el 9 y el 10 enero con síntomas compatibles con un contagio.

Este cronista fue internado en minutos luego de detallar su situación y de inmediato los facultativos procedieron a extraer muestras de sangre y a ubicar una línea de suero para evitar la deshidratación, mientras un especialista mantenía con una conversación tendiente a conocer cuales fueron los últimos movimientos en la zona.

El aislamiento se lleva adelante en un pabellón apartado de las salas comunes en el que el paciente es atendido por profesionales cubiertos por mascarillas, antiparras, guantes de látex y batas de color azul que los protegen de la saliva vaporizada producida durante un diálogo común.

En esas condiciones, el paciente no puede interactuar con ninguna otra persona ni ser visitado por sus familiares mientras espera los resultados que una vez enviados desde Bariloche al Instituto Malbrán de Buenos Aires demoran alrededor de 48 horas.

Todos los equipos de aislamiento utilizados por el personal médico y de limpieza en las numerosas visitas de cada jornada son ubicados, unos tras otros, en bolsas de plástico gruesas que quedan herméticamente cerradas.

"Debemos estar por encima de la situación, tenemos que dar lo mejor de nosotros mismos", dijo a Télam el director de la institución Leonardo Gil.

En tanto, personal del hospital indicó a esta agencia que la dirección solicitó a los trabajadores del área de mantenimiento hace ya varios meses el acondicionamiento de un pabellón con varias salas para los probables casos de hantavirus que podrían presentarse durante el verano. (Télam)