Un cientifico del Conicet rememora el peritaje de las imagenes del 19 y 20 de diciembre de 2001

El físico del Conicet Rodolfo "Willy" Pregliasco, definió como "uno de los trabajos más emotivos" de su carrera científica la desclasificación del material audiovisual contenido en la causa judicial que se siguió por la represión del 20 de diciembre de 2001, y consideró que realizó un aporte para esclarecer un hecho que "de alguna manera reconfiguró el mapa político" de Argentina.
"Fue uno de los trabajos más emotivos de mi carrera, por la dimensión histórica de los hechos, y porque las imágenes eran muy impactantes" reflexionó Pregliasco según un documento difundido por El Programa Nacional de Ciencia y Justicia del Conicet.
A su vez, el físico remarcó que desde su área de investigación se procuró "reconstruir ese día", en el cual se produjo el momento culminante del estallido social que ocasionó la renuncia de Fernando de La Rúa a la presidencia, y cuyas consecuencias aún resuenan en la actualidad.
"Fue una jornada de la que todavía estamos viviendo algunas consecuencias. Fue tan importante para Argentina y que de alguna manera reconfiguró el mapa político del país", remarcó el investigador.
El científico, que actualmente trabaja en el Centro Atómico de Bariloche, fue convocado por el Tribunal Oral Federal N°6 para ser el encargado de la reconstrucción gráfica de lo sucedido en el centro porteño durante la noche del 19 de diciembre y a lo largo del 20.
Durante un mes y medio trabajó interpretando 126 horas de videos y cientos de fotos de fuentes oficiales y canales de televisión abierta que registraron lo que había ocurrido en el centro porteño.
"Hubo que tener paciencia, tomarse muchas pausas. Fue muy movilizante hacerlo", siguió Pregliasco y afirmó que "lo que me sirvió fue tratar de objetivarlo, de apelar al pensamiento científico para organizar las cosas y hacer una contribución humana desde la ciencia al esclarecimiento de la causa".
El científico ya había participado como perito en otras causas tales como la muerte de Teresa Rodríguez, asesinada durante el desalojo de un piquete en Neuquén, en 1997.
También participó en la la identificación en el libro de la comisaría 9ª de La Plata en el contexto de la investigación del caso de Miguel Bru, un estudiante universitario de periodismo desaparecido desde desde 1993.
Pregliasco intervino también en la reconstrucción de los hechos perpetrados en la base naval Almirante Zar y que son conocidos como la "Masacre de Trelew", cuando en agosto de 1972 fueron asesinados por efectivos de La Armada varios militantes políticos que habían intentado una fuga del penal de Rawson.
"Lo que uno va haciendo te va dando ideas para hacer las pericias que vienen después", afirmó, aunque destacó que el 19 y 20 de diciembre tenía como "particularidad" que "la cantidad de evidencia y el volumen de información era infernal".
El físico destacó que, en aquel momento, el presidente del Conicet era Roberto Salvarezza, quien le "ordenó un adelanto de fondos para materiales con el que compramos dos computadoras y dos monitores grandes que instalamos en una oficina en Bariloche", cuyo monto fue devuelto luego por el Juzgado que encargó la pericia.
Para realizar el trabajo, primero se sistematizaron todos los videos y se anotó la zona y el horario de cada registro, y luego se buscaron las coincidencias entre los materiales.
"Como teníamos distintas fuentes de video, buscamos coincidencias entre las imágenes grabadas en la calles y las de la televisión. Cuando captábamos con las dos cámaras un mismo movimiento, podíamos sincronizar una cámara con la otra", explicó.
Una vez sincronizadas las imágenes, diseñaron un un programa de computación que les permitió verlas todas de forma simultánea, al que denominaron "el panóptico".
Hoy, a 20 años de la represión que causó cinco muertos en el centro porteño, el científico reflexionó que "si volviera a pasar algo similar, o tuviéramos una pericia parecida para resolver, tendríamos miles de videos y fotos gracias a los celulares. Saber la hora y el lugar sería más sencillo y se podía reconstruir mejor".
"Podríamos, gracias a la tecnología, tener un software más elegante y mejores computadoras, menos primitivas, para resolverlo", concluyó. (Télam)