El secretario de Culto se reunio con los cofundadores de la confraternidad judeo musulmana

El secretario de Culto, Guillermo Oliveri, recibió hoy a los cofundadores de la confraternidad judeo musulmana, Miguel Steuermann y al Imám Marwan Gill, presidente de la comunidad Ahmadía, y consideró ese encuentro interreligioso como "un verdadero modelo de exportación de las cosas buenas" que suceden en Argentina.
La reunión se concretó en la antesala del tradicional desayuno anual de oración que se realizará en Washington, el martes y miércoles próximos, y al que ambos representantes religiosos fueron invitados.
"Es un verdadero modelo de exportación de las cosas buenas que suceden en nuestras tierras", afirmó Oliveri en alusión a la iniciativa de la confraternidad judeo musulmana en Argentina, según informó Cancillería.
De esa manera, el secretario de Culto resaltó la acción del Papa Francisco y señaló que con su "tarea pastoral en la Argentina, comprendió la necesidad de que todas las religiones trabajen en conjunto en una genuina búsqueda del encuentro y la Paz".
En el comunicado, se destacó que "la Cancillería a través de la Secretaría de Culto ha colaborado con la confraternidad en la organización de eventos en la embajada en Washington y los consulados en New York y Miami".
La tradicional plegaria de la que participarán Steuermann y Gill, se realiza desde hace 75 años y concurren representantes de sectores religiosos, culturales y políticos.
Este año, el desayuno será precedido por un congreso sobre la libertad religiosa en el mundo.
Oliveri rescató "las acciones solidarias que han desarrollado durante el último año, en beneficio de chicos de la parroquia Cristo del Perdón en la Reja, Partido de Moreno".
También recordó que hace cuatro meses el Papa Francisco y el Jalifa Massor, de la comunidad Ahmadia, recibieron a los impulsores del diálogo entre judíos y musulmanes.
"Ambos líderes religiosos, señalaron la importancia de esta iniciativa de hermandad, que demuestra que la verdadera religión siempre es la convivencia pacífica y amorosa con el diferente como una manera de enriquecer nuestra experiencia humana, como hijos de un mismo Dios, que nos convoca a santificar y dignificar la vida", señaló el texto.
La Cancillería destacó que "entre los principios de la confraternidad judeo-musulmana se encuentra la necesidad de buscar lo común y lo diferente entre ambas religiones Abrahámicas y no importar conflictos geopolíticos externos que suceden a miles de kilómetros de distancia física y cultural". (Télam)