Putin visito una base rusa en Damasco y charlo con Al Assad sobre la crisis en la region

El presidente de Rusia, Vladimir Putin, hizo hoy una sorpresiva visita a Damasco, donde se reunió con su par sirio, Bashar al Assad, con quien analizó la escalada de tensión en la zona y la lucha contra el terrorismo, cuestiones que abordará mañana con el mandatario de Turquía, Recep Tayyip Erdogan.
La de hoy fue la primera visita de Putin a Damasco desde el inicio del conflicto en Siria en 2011, y el encuentro con Al Assad fue en la sede de operaciones que tienen los rusos en la capital siria.
En la charla, los dos presidentes hablaron especialmente de la situación en Idlib, el último bastión insurgente en Siria y que escapa al control de Damasco, informó la Presidencia siria.
La Presidencia y la estatal agencia SANA publicaron fotografías de ambos líderes en el momento en que se dan la mano y se felicitan por la Navidad Ortodoxa, que se celebra hoy.
"Los presidentes Al Assad y Putin han abordado en su encuentro de hoy los últimos desarrollos en la región y han tratado los planes para acabar con el terrorismo que amenaza la seguridad de los ciudadanos sirios en Idlib", señaló el comunicado del Ejecutivo sirio.
En la provincia de Idlib, en el noroeste de Siria, se libra la batalla del Ejército sirio y las tropas rusas contra los grupos rebeldes y yihadistas que tienen presencia en la región, fronteriza con Turquía.
El principal objetivo de Damasco y Moscú es acabar con los grupos ligados al Frente al Nusra, antigua denominación de la ex filial siria de Al Qaeda, ahora sumada a la alianza islamista Organismo de Liberación del Levante, que controla prácticamente todo Idlib.
La ofensiva comenzó el 30 de abril último, y tras un alto el fuego unilateral el pasado 31 de agosto, se reactivó en el sur de la provincia y sus unidades avanzan para seguir capturando poblaciones.
El texto detalla que en la charla Putin y Al Assad también conversaron sobre "la situación en el norte de Siria y las medidas que Turquía" adoptó en la región.
Turquía ocupó una extensa área en el norte y noreste de Siria, antes controlada por los kurdos, quienes a su vez acabaron pidiendo ayuda a Damasco y los rusos para desplegar sus tropas y combatir a los turcos, una cuestión que Putin seguramente analizará mañana con Erdogan.
Según las fuentes que citan las agencias EFE y Ansa, no hubo comentarios sobre la muerte del comandante iraní Qasem Soleimani el jueves pasado en Bagdad por un ataque estadounidense.
Tras el encuentro entre los dos líderes, que curiosamente se realizó en la sede de las fuerzas rusas y no en el palacio presidencial de Al Assad, como suele ocurrir cuando recibe a personalidades, los dos presidentes caminaron por Damasco y visitaron la simbólica capilla de San Juan el Bautista en la mezquita de los Omeyas. Putin firmó el libro de visitas.
En el tour religioso, fueron después a la Catedral mariamita de Damasco, sede de la Iglesia Griega Ortodoxa de Antioquía, donde Putin encendió unas velas junto a Al Assad para conmemorar la Navidad Ortodoxa.
Mañana Putin estará en Estambul para reunirse mañana con Erdogan, y participar en la puesta en marcha del gasoducto Turk Stream, que transportará el combustible ruso a Turquía por el mar Negro.
El tema del gas, de hecho, en este contexto quedará en segundo plano y parece obvio que la cuestión geopolítica estará en el centro de la escena.
El Kremlin hizo saber hoy que en Estambul que "se discutirá sobre el posterior desarrollo de la cooperación ruso-turca y de temas internacionales relevantes, incluida la situación en Siria y en Libia". (Télam)