Problemas aduaneros, disputas diplomaticas y enojo de musicos en el primer mes del Brexit

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Mundo 31 de enero de 2021 Agencia Télam
Problemas en la importación y exportación por los controles aduaneros, disputas diplomáticas, aumento del nacionalismo escocés, acusaciones por la provisión de vacunas contra el coronavirus y hasta el descontento de estrellas británicas como Elton John y Sting son algunas de las consecuencias del divorcio entre la Unión Europea (UE) y el Reino Unido que cumple su primer mes.
El 1 de enero y tras un largo período de transición para negociar acuerdos comerciales y migratorios, se concretó el Brexit, la salida de Londres de la UE que fue votada en el referendo de 2016 y que en el camino le costó el puesto a dos primeros ministros: David Cameron y Theresa May.
Una semana después de la ruptura se viralizó la evidencia de que el proceso iba a ser más problemático que lo prometido por el premier británico actual, Boris Johnson: las fotos de los estantes vacíos en algunos supermercados de Irlanda del Norte empezaron a circular de forma masiva en redes sociales y medios de comunicación.
Para evitar reinstaurar una frontera dura con la República de Irlanda que reviva las décadas de conflicto armado, se estableció que Irlanda del Norte siga siendo parte del mercado común europeo, pero sí hay nuevos y burocráticos controles aduaneros en los productos frescos que entran desde Gran Bretaña (Inglaterra, Escocia y Gales) y los que circulan hacia allí.
Al poco tiempo, los problemas se empezaron a notar en ambos lados del Canal de la Mancha, con góndolas vacías también en las tiendas británicas Marks & Spencer en París.
Sin embargo, es el Reino Unido el que se aisló del resto de los países y el que sufre el mayor impacto del divorcio.
“Algunos de los mayores problemas hasta ahora son el aumento de la inflación y la ralentización de la inversión extranjera tras el referéndum de 2016, los retrasos en la frontera y el tráfico de camiones en Kent (para cruzar por el Eurotúnel hacia Francia), la interrupción en la cadena de suministro y la disminución de las exportaciones británicas a la UE, más visiblemente entre los pescadores, pero también en varios otros sectores”, enumeró en declaraciones a Télam Nick Hopkinson, miembro del Movimiento Europeo del Reino Unido, una organización que promueve mantener lazos con el continente en la era posBrexit.
Hopkinson, experto en política exterior, también destacó entre las principales consecuencias la pérdida en el acceso a programas europeos como el Erasmus, para el intercambio de estudiantes, y la mudanza de cientos de empresas de servicios financieros que tenían sus sedes en Londres ante la incertidumbre sobre el acceso que tendrán a los mercados europeos.
El divorcio no solamente afectó a las empresas, sobre todo a las pequeñas que les cuesta más adaptarse a las nuevas reglas de juego, sino que en este mes de vigencia dejó varias historias mínimas entre los ciudadanos.
Por ejemplo, series que desaparecieron de las plataformas de streaming con la ruptura del mercado digital europeo, un inesperado “recargo Brexit” en las encomiendas de paquetes por los cambios impositivos y hasta sándwiches confiscados a camioneros en la frontera neerlandesa por no poder introducir carne o lácteos desde el Reino Unido.
El fin de la movilidad migratoria afectó también a las estrellas de la música británica, como hicieron saber Elton John, Sting y Ed Sheeran, que formaron parte de una carta firmada por 100 artistas en la que acusaron al Gobierno de Johnson de haberles “fallado vergonzosamente", ya que ahora deben pedir visas especiales de trabajo para sus giras por países de la UE.
Los cortocircuitos se sienten además entre las máximas autoridades: el Gobierno británico se negó a darle estatus diplomático pleno al embajador de la UE, algo que sí ocurre en 142 países del mundo, ya que lo considera "representante de una organización internacional" y no de un Estado; y en represalia, el bloque decidió posponer los contactos con el nuevo embajador del Reino Unido en Bruselas hasta que se resuelva la disputa.
Con la mirada puesta en el futuro cercano, una de las consecuencias más relevantes es el aumento del nacionalismo en Escocia.
El Partido Nacional Escocés buscará ampliar su poder en las elecciones para el parlamento local del 6 de mayo y cumplir la promesa de un nuevo referendo para independizarse, que a diferencia del realizado en 2014, hoy obtendría una mayoría según distintos sondeos.
“El Brexit aumenta las posibilidades de que el Reino Unido se desintegre”, sintetizó Hopkinson, quien también mencionó “el gradual fortalecimiento” que está teniendo la causa por una unidad de las dos irlandas, algo que reflejó la semana pasada una encuesta del diario Sunday Times con un 51% de los consultados a favor de un plebiscito en los próximos cinco años.
En cuanto a la economía, el Fondo Monetario Internacional rebajó de 5,9% a 4,5% la proyección de crecimiento para 2021 del PBI británico, una de las caídas más pronunciadas entre los países en desarrollo, solo por detrás de Canadá y España, aunque es difícil dividir cuánto de esa baja es por el Brexit y cuánto por el coronavirus en el país de Europa más castigado por la pandemia. (Télam)
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