La primera ministra británica, Theresa May, hizo hoy un último intento para convencer a los parlamentarios laboristas de que respalden su propuesta del Brexit, minutos antes de que el Parlamento dé su veredicto en una votación con final abierto.

La líder conservadora se dirigió hace instantes a los diputados que se encuentran debatiendo las enmiendas del acuerdo y dijo que la gran mayoría en la Cámara de los Comunes votó a favor de respetar el resultado del referéndum y por lo tanto, para activar el artículo 50, el mecanismo que habilita la salida del Reino Unido de la Unión Europea.

En su discurso, criticó con dureza la intervención del líder laborista, Jeremy Corbyn, quien demanda que la Unión Europea (UE) reabra las negociaciones si hoy el Parlamento vota en contra del acuerdo.

Además de exigir esto, el líder laborista dijo en su intervención en la Cámara de los Comunes que una elección general en Reino Unido le daría a un nuevo gobierno el mandato de romper la parálisis en la que han entrado las negociaciones dentro del país y con Bruselas.

En ese sentido, Theresa May, alegó que el discurso de Corbyn fue en línea con el resto de su discurso hacia el Brexit: "mucha crítica y poca coherencia".

También se rió de la idea de que Corbyn podría conseguir una renegociación del acuerdo con la UE en sólo semanas.

La líder británica condenó a Corbyn por "su cinismo" y lo acusó de haber perdido el derecho a exigir lealtad a los diputados de su bancada laborista que tienen una visión más pragmática.

Dijo además que espera que los diputados que se oponen a salir sin ningún acuerdo de la UE, cuyos electores dependen de empleos en la industria manufacturera, piensen mucho en rechazar su acuerdo.

Se espera que los diputados voten cerca de las 20 hora local (17 hora argentina).

Mientras tanto, cientos de manifestantes esperan frente al palacio de Westminster, la sede del Parlamento británico.

El Reino Unido deberá abandonar la UE el 29 de marzo de este año. (Télam)