Los homicidios dolosos en Mexico bajan 6,6% en 2022, segun informe oficial

Los homicidios dolosos en México se redujeron este año un 6,6% respecto del anterior, según un informe difundido hoy por el presidente Andrés López Obrador, que prevé que cerrará el año con 31.127 asesinatos.
"Hemos avanzado mucho este año, ya empezamos a bajar la incidencia delictiva en específico en homicidios", dijo el mandatario de izquierda al presentar la estadística en su conferencia de prensa diaria divulgada por medios locales y la agencia de noticias AFP.
En 2021 se contabilizaron 33.330 homicidios, con un promedio de 91 casos diarios. La media este año fue de 85, según el balance, que indica que en los primeros 28 días de diciembre se cometieron 1.998 crímenes.
"Nos llevó tiempo romper la tendencia al alza por la dinámica de incremento de la violencia que se traía", admitió el gobernante, quien agregó que los homicidios se dispararon 192,8% durante el gobierno del presidente de derecha Felipe Calderón (2006-2012).
El mandatario conservador lanzó en 2006 una fallida ofensiva antidrogas, con la participación de militares, a la que se adjudica la espiral de violencia que padece México, con unos 340.000 asesinatos y decenas de miles de desaparecidos desde entonces, la mayoría cometidos por el crimen organizado.
México había registrado 33.308 homicidios dolosos en 2021, un 3,6% menor a la de los asesinatos de 2020.
El dato de 2021 logró una pequeña mejoría respecto a los 34.554 homicidios constatados en 2020. En 2019 hubo un récord con 34.690 víctimas de homicidio, el mayor número desde 1997, cuando comenzaron esos registros.
Más del 50% de estos asesinatos fueron en los estados de Guanajuato y el Estado de México (centro), Baja California y Chihuahua (norte), además de Jalisco y Michoacán (oeste).
López Obrador llegó en 2018 a la presidencia prometiendo pacificar al país. Su mayor apuesta fue la creación de la cuestionada Guardia Nacional, un grupo de seguridad principalmente compuesto por militares, y la entrega de apoyos sociales para atacar lo que él llama "las causas de la violencia".
Desde la oposición, el mandatario había sido crítico de la estrategia militar contra los carteles de la droga, aunque ya en el poder multiplicó la participación de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad. (Télam)