La Asociación Nacional de Gobernadores, que aglutina a los jefes de gobierno de todos los estados, solicitó al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y a los líderes del Congreso que terminen "inmediatamente" con el cierre de gobierno y resuelvan sus diferencias.

"Los gobernadores se han unido para decirle al gobierno federal que abra las agencias que actualmente están cerradas, al tiempo que se encuentra un compromiso bipartidista a largo plazo sobre los temas que actualmente dividen a Washington", escribieron los gobernadores en una carta con fecha de ayer y publicada hoy.

El texto, firmado por el presidente y vicepresidente de la Asociación, el gobernador demócrata de Montana Steve Bullock y el gobernador republicano de Maryland Larry Hogan, el cierre parcial afecta a "nueve departamentos federales y docenas de pequeñas agencias con los que el gobierno de cada estado coopera a diario".

El 22 de diciembre pasado venció el plazo para que el Congreso apruebe una nueva ley de presupuesto y el gobierno federal se quedó sin fondos y tuvo que cerrar sus departamentos y agencias no esenciales.

En total, 800.000 de los 2,1 millones de empleados públicos federales quedaron sin sueldo. Según un informe de la Comisión de Presupuesto del Senado, cerca de la mitad tienen que seguir yendo a trabajar de todas maneras, mientras que el resto fue licenciado hasta que el Congreso apruebe nuevos fondos.

Entre los que deben seguir yendo a trabajar sin cobrar, se destacan 41.000 miembros de las fuerzas de seguridad, cerca del 88% de los empleados del Departamento de Seguridad Interior y más de 5.000 bomberos.

Entre los que fueron licenciados, en cambio, se destacan más del 85% de los empleados del Departamento de Comercio, el 96% de la planta de la NASA, unos 52.000 trabajadores del Servicio de Impuestos Internos y el 95% de la cartera de Desarrollo Urbano y de Vivienda.

Además, la mayoría de los parques nacionales, varios museos públicos y cortes dedicadas específicamente a temas migratorios fueron cerrados.

La cadena de noticias CBS advirtió, asimismo, que durante este mes la mayoría de los estadounidenses que no son empleados federales no sentirán el cierre parcial del gobierno.

No obstante, si el cierre y la situación de empate político entre el Congreso y la Casa Blanca continúan en febrero, miles de ciudadanos empezaran a sentirlo, por ejemplo, los beneficiarios del Programa de Asistencia de Nutrición Suplementaria.

Por ahora, nada indica que el oficialismo del presidente Donald Trump esté cerca de llegar a un acuerdo con la oposición demócrata que desde principio de año controla la cámara baja del Congreso.

Mientras el primero sigue firme en su exigencia de una partida millonaria extra para expandir el muro a lo largo de toda la frontera sur con México, el segundo se niega a dedicar esa plata en eso y pide financiar a programas migratorios vaciados por este gobierno.

Pese a este empate, Trump lanzó ayer una nueva ofensiva para defender su posición.

Hoy el mandatario dará un mensaje a la nación, en el que podría declarar una emergencia nacional para liberar fondos sin pasar por el Congreso, y el jueves viajará a la frontera sur con México para reunirse con las autoridades políticas y de seguridad sobre "la necesidad del muro", según explicó en Twitter.

Trump hablará esta noche en el horario estelar y se espera que poco después le contesten los máximos líderes opositores en el Congreso, la presidenta de la cámara baja, Nancy Pelosi, y el jefe de la bancada minoritaria en el Senado, Chuck Schumer. (Télam)