La Unión Europea (UE) condenó hoy la "represión" en Nicaragua y amenazó con tomar medidas para favorecer una solución "pacífica y negociada" a la crisis y responder al deterioro de la situación de los derechos humanos y el Estado de derecho.
"La UE seguirá supervisando atentamente la situación y subraya su disposición a hacer uso de todos los instrumentos de actuación de que dispone a fin de contribuir a encontrar una salida pacífica y negociada a la crisis actual y responder a cualquier nuevo deterioro de los derechos humanos y del Estado de derecho", indicó la UE, en unas conclusiones aprobadas por su Consejo.
El organismo lamentó la "brutal represión" de las manifestaciones iniciadas en abril de 2018 por parte de las fuerzas de seguridad y grupos armados afines al Gobierno, lo que provocó enfrentamientos, varios cientos de víctimas mortales y heridos y la detención de centenares de ciudadanos, con "irregularidades generalizadas y arrestos y procedimientos judiciales arbitrarios".
Denunció a su vez que las recientes medidas contra organizaciones de la sociedad civil y medios de comunicación independientes suponen "un nuevo golpe para la democracia, los derechos humanos y las libertades civiles que agrava la crisis política y social".
"La UE condena con firmeza la represión de la prensa y la sociedad civil y el uso de leyes antiterroristas para reprimir opiniones discrepantes en Nicaragua", enfatizó.
Para el bloque, la cancelación en el registro oficial de varias organizaciones de la sociedad civil y las redadas ilegales contra medios de comunicación independientes, entre otras medidas, "penalizan los actos de protesta y crean un entorno en el que no se garantizan derechos fundamentales", reprodujeron las agencias de noticias EFE y DPA.
"No es posible una reconciliación mientras no se establezca un diálogo nacional transparente, integrador y constructivo entre todas las partes implicadas y no haya justicia para todas las víctimas", subrayó. (Télam)