La Iglesia Católica de Bolivia, sacudida por un creciente escándalo de abusos de menores, reconoció hoy que fue "sorda" a los sufrimientos de las víctimas de sacerdotes pederastas, un día después de que el presidente Luis Arce le pidió al Papa acceso a la documentación sobre los casos denunciados.

El secretario general de la Conferencia Episcopal de Bolivia (CEB), Giovani Arana, dijo en un comunicado oficial que la institución católica "en lugar de darles la protección y el cuidado que merecían, (las víctimas) se encontraron con una Iglesia sorda a sus sufrimientos".

"Tenemos la certeza de haber sido parte, directa o indirectamente, de un dolor profundo causado a personas inocentes que han sido víctimas de abuso sexual", agregó Arana, citado por la agencia de noticias AFP.

Bolivia fue sacudida por las revelaciones hechas el 30 de abril por el diario El País sobre los abusos cometidos por el fallecido clérigo jesuita Alfonso Pedrajas, desde la década de 1970.

El medio español publicó el diario personal del clérigo jesuita, que le fue entregado por un familiar de Pedrajas, más conocido como el padre Pica, muerto en 2009 en Bolivia de cáncer a los 66 años,

Según su diario personal escrito en una computadora portátil, Pedrajas abusó presuntamente de decenas de menores en internados católicos en Bolivia en las décadas de 1970 y 1980.

En el diario personal, el cura dice haber hecho "daño a mucha gente (¿a 85?), a demasiados". Además, reconoció que fue protegido por clérigos superiores de la Compañía de Jesús.

El jesuita se instaló en Bolivia en 1971 y realizó labores educativas en varios centros hasta meses antes de morir. La mayor cantidad de abusos los habría cometido en el Colegio Juan XXIII de la ciudad de Cochabamba, centro del país.

El caso de Pedrajas provocó en Bolivia que se denuncie a otros sacerdotes que presuntamente también abusaron de menores.

La Fiscalía de Bolivia abrió una investigación, que se mantiene confidencial, y llamó a las víctimas a presentar denuncias.

Hasta ahora hubo ocho denuncias por pederastia en contra de los sacerdotes españoles Luis María Roma, Alejandro Mestre y Antonio "Tuco" Gausset, todos fallecidos.

El presidente Luis Arce solicitó al papa Francisco esta semana todos los archivos y expedientes sobre los abusos sexuales cometidos por sacerdotes en Bolivia.

"Pido a usted que la Justicia boliviana pueda acceder a todos los archivos, expedientes e información referente a estas denuncias y hechos de abusos sexuales cometidos por sacerdotes y religiosos católicos en territorio boliviano", dice la carta enviada por el mandatario.

Tras estallar el escándalo el Vaticano envió a Bolivia a monseñor Jordi Bertomeu, miembro del Dicasterio para la Doctrina de la Fe, para conocer en persona todo lo ocurrido.

Bertomeu llegó a ayer a Bolivia procedente de Paraguay, donde había estado investigando acusaciones similares contra funcionarios de la iglesia y en 2018 lideró la investigación sobre abusos cometidos por sacerdotes contra menores en Chile.

En la carta que Arce mandó a Francisco para tener acceso a todos los archivos y expedientes sobre pederastia en Bolivia, dijo que su país se reserva el derecho de recibir a curas si tienen denuncias, y que su gobierno buscará firmar con el Vaticano un nuevo convenio de relación.

El Gobierno boliviano planteó la aplicación de un "mecanismo de reparación" para las víctimas de esos hechos y el Parlamento analiza la creación de una "comisión de la verdad", que investigue otros posibles casos de pederastia y abuso sexual a menores. (Télam)