El canciller de Cuba, Bruno Rodríguez, aseguró hoy que la Casa Blanca está "empeñada en escalar en su hostilidad" contra la isla, en tanto la Cancillería acusó a Washington de "no cooperar" en la "búsqueda de respuestas" sobre los supuestos ataques acústicos contra diplomáticos estadounidenses.

En su cuenta de la red Twitter, Rodríguez precisó que la confrontación que Washington parece asumir "no sólo marca un grave retroceso en la relación bilateral, sino que plantea nuevos riesgos y peligros, en el que se avizoran medidas adicionales de bloqueo contra Cuba".

Sin hacer referencia a los presuntos ataques sónicos que afectaron a diplomáticos de Estados Unidos, Rodríguez destacó que, aún en "ese escenario hostil, marcado por el recrudecimiento del bloqueo económico, comercial y financiero vigente por casi seis décadas, se preservan algunos factores favorables", derivados del acercamiento que en diciembre de 2014 anunciaron los entonces presidentes Raúl Castro y Barack Obama.

Al respecto, mencionó "la existencia y el funcionamiento lastimado y lesionado de ambas embajadas", pese a que el presidente Donald Trump redujo la delegación diplomática en La Habana y expulsó a personal de la sede isleña en Washington, consignó la agencia Prensa Latina.

En ese momento, la Casa Blanca justificó su decisión por los supuestos ataques acústicos contra sus diplomáticos, un incidente que ahora algunos investigadores consideran el simple accionar de una especie de grillo que habita en el Caribe.

Tras esa revelación científica, el director de la Cancillería cubana para Estados Unidos, Carlos Fernández de Cossío, lamentó lo que consideró la falta de ayuda de Washington para resolver el caso.

"El gobierno estadounidense no ha mostrado evidencia alguna de que tales hechos se hayan producido", expuso en Twitter.

Para el funcionario, Washington "ha rehusado cooperar en la búsqueda de respuestas" para esos "reportes sobre afecciones de salud de sus diplomáticos".

Los primeros y más masivos incidentes ocurrieron en noviembre de 2016, aún bajo el gobierno de Obama, cuando unos 20 diplomáticos en esa sede fueron afectados severamente por sonidos de procedencia desconocida.

Para las autoridades cubanas, la denuncia estadounidense fue parte de un plan global del actual gobierno de Trump para afectar las relaciones bilaterales, reseñó la agencia de noticias ANSA.

Al cruce mutuo de acusaciones se sumó ahora una explicación al menos curiosa: investigadores científicos de Estados Unidos e Inglaterra expusieron en la Sociedad de Biología Integrativa y Comparativa (SICB), con sede en Europa, que los "ataques sónicos" que examinaron en grabaciones coinciden "con el canto de los grillos que habitan en los alrededores de la sede" diplomática norteamericana en La Habana.

"De manera bastante definitiva, la grabación es de un grillo", explicó uno de los autores del estudio, Alexander L. Stubbs, aunque aclaró que la investigación no concluye que los diplomáticos no fueran víctimas de un ataque, sino que la grabación no corresponde a un arma sónica. (Télam)