El Parlamento Europeo celebró hoy el "éxito" que supuso la introducción del euro hace 20 años, durante una sesión en la que se reconoció que la debilidad de la joven moneda radica en la ausencia de una "coordinación perfecta" entre las políticas económicas de los países del continente.
"Cuando lanzamos el proceso que nos llevaría a la moneda única nos llamaron locos, creían que desaparecería, que no funcionaría", recordó el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, en la sesión de la Eurocámara
"Pero hoy -siguió- vemos con satisfacción y felicidad que el empeño en que nos embarcamos hace 20 años ha sido coronado de éxito".
La introducción del euro se concretó el 1 de enero de 1999 en once países. Actualmente la moneda es utilizada en 19 de los 28 países de la Unión Europea (Alemania, Austria, Bélgica, Chipre, Eslovaquia, Eslovenia, España, Estonia, Finlandia, Francia, Grecia, Irlanda, Italia, Letonia, Lituania, Luxemburgo, Malta, Países Bajos y Portugal)
Las 19 naciones de la "zona del euro" o eurozona abarcan a 340 millones de personas y esa moneda se convirtió en la segunda divisa internacional detrás del dólar.
Las autoridades, además, aseguran que el 75 por ciento de los europeos apoya la moneda única.
La "gran debilidad" del euro reside, dijo Juncker, en que todavía falta esa "coordinación perfecta" entre las políticas económicas de los países y en que persisten las divergencias económicas y sociales entre ellos, por lo que instó a "no bajar los brazos" y mejorar la coordinación de las políticas fiscales y presupuestarias, informó la agencia española EFE.
También habló el presidente del Parlamento Europeo, Antonio Tajani, quien llamó a completar la Unión del Mercado de Capitales y la unión bancaria y advirtió que "es imperativo que concluyamos la arquitectura que hemos empezado a construir".
"Si nos quedamos donde estamos nos arriesgamos a ser arrastrados por una nueva crisis", añadió, en alusión a los rescates de economías puntuales que tuvo que hacer Europa en estos 20 años, atribuidas a menudo a la falta de coordinación de políticas económicas.
El presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, instó a su turno a seguir trabajando para reforzar la eurozona. (Télam)