MADRID, 16 ENE - Barcelona declaró la emergencia climática y anunció la peatonalización de 15 kilómetros de calles, entre un paquete de un centenar de medidas.
El ayuntamiento que gobierna la progresista Ada Colau se comprometió a reducir las emisiones de CO2 en dos millones de toneladas antes de 2030, un 50% respecto de 1992.
Entre las 103 medidas se incluyen nuevas hectáreas de zonas verdes y la individualización de la recogida de residuos.
"Esto no es un simulacro", proclamó Colau.
La alcaldesa anunció además que ella, los concejales y los empleados municipales no utilizarán el avión para trayectos de menos de 1.
000 kilómetros si tienen alternativa en tren.
(ANSA).