El Ejército de Liberación Nacional (ELN), la mayor guerrilla activa en Colombia, asumió hoy la autoría del atentado terrorista del jueves pasado en una escuela de policía de Bogotá, mientras el gobierno de Iván Duque entró en un roce diplomático con Cuba al insistir en el pedido de captura de los miembros de la organización que están en La Habana.
El ELN, en un artículo con fecha 21 de enero publicado en Voces, su página de internet, dijo que su acción en la Escuela de Cadetes de la Policía General Santander, con un resultado de 21 muertos y 68 heridos, fue un hecho "lícito", perpetrado "dentro del derecho de guerra".
Añadió que en esa escuela de cadetes se forman oficiales de policía "que luego realizan inteligencia de combate, conducen operaciones militares y participan activamente en la guerra contrainsurgente", entre otras funciones.
El Gobierno colombiano ya había dado por seguro que el atentado, cometido con una camioneta cardada con 80 kilogramos de explosivos, fue obra del ELN, al punto de que el presidente Duque ordenó este sábado que se deje sin efecto la suspensión de las órdenes de captura contra los líderes de la organización guerrillera.
"Después de convocar el Consejo de Seguridad Nacional y de dialogar intensamente con líderes de la comunidad internacional, he ordenado el levantamiento de la suspensión de las órdenes de captura a los diez miembros del ELN que integraban la delegación de este grupo en Cuba y he revocado la resolución que creaba las condiciones que permitan su permanencia en ese país", señaló el sábado Duque.
Varios de los integrantes de la conducción de la guerrilla están en La Habana porque en la capital cubana se intentaba reflotar el diálogo que busca poner fin al conflicto interno de décadas, tal como sucedió con las FARC, una posibilidad que quedó completamente congelada después del atentado.
Pero el pedido de captura derivó en un roce diplomático con Cuba, cuyo gobierno respondió hoy que "jamás ha permitido ni permitirá" que su territorio sea usado para la "organización de actos terroristas" y aseguro que cumplió "estrictamente su papel como garante y sede alternativa de la Mesa de Diálogos de Colombia entre el Gobierno y el ELN", según afirmó a través de Twitter el canciller Bruno Rodríguez.
"Con la moral de haber sido víctima del terrorismo de Estado por décadas y de una ejecutoria intachable, condenamos el terrorismo en todas sus formas y manifestaciones, sean cuales fueren sus motivaciones", agregó el jefe de la diplomacia cubana.
Ante el pedido concreto de captura de los guerrilleros, el Gobierno de la isla caribeña sostuvo que actuará "en estricto respeto a los Protocolos del Diálogo de Paz firmados entre el Gobierno y el ELN, incluido el Protocolo en Caso de Ruptura de la Negociación".
"No hay protocolo que ampare al terrorismo", respondió de inmediato el Ejecutivo colombiano, al reiterar su pedido a Cuba para que le entregue a los miembros de ELN que están en La Habana.
"El Gobierno nacional insistirá en la entrega inmediata de los miembros de la delegación del ELN que se encuentran en Cuba y hay una razón profunda para ello: el ELN como organización reconoce su autoría (del ataque terrorista) y como organización debe ser responsable", manifestó el alto comisionado de Paz, Miguel Ceballos, en una rueda de prensa de la que dio cuenta Caracol Radio.
Por su parte, el canciller Carlos Holmes Trujillo reveló que se envió una nueva nota al gobierno de Cuba para que agilice la captura y entregue a las autoridades del ELN. Para el diplomático, la isla tiene la "obligación" de hacer "efectivas las órdenes de captura". (Télam)