Blinken llego a Arabia Saudita para reforzar las relaciones con su aliado

El jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, llegó hoy a Arabia Saudita con el objetivo de reforzar las relaciones entre ambos países, hablar del conflicto en Sudán y sobre la normalización de los lazos con Israel.
Blinken llegó por la noche a Jeddah, a orillas del mar Rojo, donde se entrevistará con el príncipe heredero y dirigente de facto del reino, Mohammed bin Salman, según un responsable estadounidense que prefirió permanecer en el anonimato, indicó la agencia AFP.
La visita de Blinken pretende impulsar la "cooperación estratégica" entre Estados Unidos y Arabia Saudita en distintos frentes globales, regionales y bilaterales, y se produce un día después de que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, haya abandonado el país.
Las relaciones entre Estados Unidos y Arabia Saudita son complicadas tras el asesinato en 2018 del periodista disidente Jamal Khashoggi, perpetrado por agentes del gobierno saudita en el consulado en Estambul.
Tampoco mejoraron con la administración de Joe Biden, ya que acusó al rico Estado del Golfo de violaciones de derechos humanos y de influir en los precios del crudo.
Sin embargo, la Casa Blanca se comprometió el pasado mes de abril a mantener un contacto regular con Riad.
El asesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan, viajó precisamente en ese mismo mes al país y se reunió con el príncipe heredero saudí para tratar la situación en Yemen.
El viaje de Blinken coincide con la mediación que Estados Unidos y Arabia Saudita están realizando en el conflicto en Sudán, donde no logran hacer respetar varias treguas entre los generales beligerantes.
Estados Unidos se declaró dispuesto a reanudar las discusiones en Jeddah con los emisarios de ambos bandos si estos son "serios" en su voluntad de respetar el cese del fuego, que facilitaría suministrar ayuda humanitaria.
Los esfuerzos de paz en Yemen, donde Arabia Saudita apoya desde 2015 a las fuerzas progubernamentales contra los rebeldes hutíes, respaldados por Irán, deberían también figurar en la agenda de discusiones.
Luego de Jeddah, Blinken viajará el miércoles a Riad, la capital saudita, donde participará en una reunión de los ministros de Relaciones Exteriores del Consejo de Cooperación del Golfo.
El jueves, en Riad, copresidirá con su homólogo saudita una reunión de la coalición de los países que luchan contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI), creada en 2014.
Otro tema que debería figurar en la agenda son los esfuerzos con miras a la normalización de relaciones entre el reino saudita e Israel.
En los últimos años, Emiratos Árabes Unidos, Bahréin y Marruecos normalizaron sus relaciones con Israel, rompiendo con décadas del consenso árabe que condicionaba el establecimiento de relaciones con ese Estado a la solución del asunto palestino. (Télam)