Curiosa selfie develó su oscuro pasado familiar: La habían robado del sanatorio

Dice la gente sabia que la verdad siempre sale a la luz. Tarde o temprano se descubren los más íntimos secretos de manera natural y muchas veces sobrenatural.

Eso parece haberle ocurrido a una joven llamada Miché Solomon, oriunda de Ciudad del Cabo, Sudáfrica, en su primer día de clases. Al arribar a la escuela secundaria Zwaanswyk, conoció a una compañera tres años menor con quien sintió afinidad al instante.

En diálogo con la prensa contó que “era como si la conociera”, la sensación hasta le “daba miedo” y “no podía entender” por qué se sentía así. Hasta bromeaban diciéndose “¡hola, hermana pequeña!”, “¡hola, hermana mayor!”, como si se hubieran conocido “en otra vida”.

Amigas desde el primer momento con Cassidy Nurse, decidieron tomarse una fotografía que cambiaría la vida de ambas para siempre.

Cuando la más chica volvió a su casa y le mostró a los papás la selfie, ambos le pidieron inmediatamente que le preguntara a Miché en qué fecha había nacido, porque notaron que sus rasgos era idénticos.



Así, Celeste y Morne Nurse dieron con la verdad: la fecha coincidía con el día en que les había robado a su bebé recién nacida.

Semanas más tarde, trabajadores sociales visitaron a Miché en la escuela para comentarle lo que podía haber pasado en sus primeros días de vida. Por supuesto, no salió de su asombro.

Una bebé de nombre Zephany Nurse, había sido secuestrada del hospital Groote Schuur hacía 17 años, el mismo día de su nacimiento, y nunca había sido encontrada.

De todas formas, accedió a realizarse una prueba de ADN, segura de que “iba a ser negativa” porque creía en su mamá. Y para su asombro total, arrojó que su verdadera familia eran los Nurse.

La madre que la crio había perdido un bebé y no tuvo mejor idea de llevársela de la clínica donde ella había nacido. Una mujer llamada Silvia que la estaba ayudando con un tratamiento de fertilidad le había ofrecido a la beba afirmando que la madre no deseaba criarla.

Eso fue una mentira, y aunque los Nurs tuvieron tres hijos más, nunca dejaron de buscar a su primogénita. En el reencuentro se emocionaron en gran medida, aunque la chica no sintió lo mismo.

Se enojó con su madre que terminó presa, y se fue a vivir con su padre adoptivo que quedo absuelto porque no pudieron comprobar que había sido partícipe del secuestro.

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