El presidente de la Cooperativa neuquina CALF, Carlos Ciapponi, cuestionó hoy la decisión oficial de eliminar subsidios al sector distribución de electricidad y los nuevos incrementos en el costo de la energía, al considerar que ya no es posible aplicar a los usuarios mayores incrementos en sus facturas de luz, mientras ello no se traduzca en mejoras a la confiabilidad del sistema y a la calidad del mismo.

En declaraciones a radio AM 550, Ciapponi dijo que llevará incluso el tema a la federación de cooperativas eléctricas de la Argentina, tras una asamblea que realizará la CALF en las próximas horas.

Ciapponi explicó que el cese del subsidio para una tarifa social (costo reducido) afecta en la capital neuquina directamente a 13.000 usuarios del servicio. "Si pagaban 600 pesos, pasarán a pagar cerca de 1.000", explicó el titular de la cooperativa para ejemplificar qué pasaría si se traslada a la factura el quite del subsidio y nadie se hace cargo de su costo.

En cuanto a la realidad del sector, detalló que el costo de la energía históricamente representó poco más de 30 % en el presupuesto de la cooperativa, y ahora está cerca del 70%; más los impuestos y tributos que se aplican en las facturas.

La CALF se expidió en desacuerdo con esta fase de la política aplicada por el gobierno de Mauricio Macri, y ya lo hizo saber con su reclamo para que se reduzca la carga tributaria, en el caso del IVA, impuesto que también aumentará su incidencia, en la medida que se incremente el costo de la electricidad que cobra la administradora nacional, Cammesa, a las distribuidoras.

El gobierno nacional ha anunciado que aplicará nuevos aumentos a ese costo de la electricidad que se produce en el país. "Esto no se ve en mejoras a la situación eléctrica en el país", sostuvo Ciapponi, al poner como ejemplo del retraso en obras de infraestructura y seguridad por fuera de la misma cooperativa, el apagón que dejó a un cuarto de la población capitalina sin luz en Nochebuena, y que fue atribuido, con cierta liviandad, a un artefacto pirotécnico casero.

En ese sentido, Ciapponi dijo que no descarta una "rebelión", que pretende llegue a todo el país, contra la última quita de subsidios al sector de distribución de electricidad (fin de la tarifa social) y los nuevos incrementos en el costo de la energía. La inédita rebelión será puesta a consideración en la próxima reunión de la federación de cooperativas eléctricas de la Argentina, que nuclea a más de 240 cooperativas de servicios públicos en quince provincias, lo que representa más de 4 millones de hogares.

También anunció Ciapponi que CALF deberá frenar obras necesarias que tenía planificado llevar adelante. "Lamentablemente tenemos que dar malas noticias. Pero el costo de la energía, que históricamente representó poco más de 30 por ciento en el presupuesto de la cooperativa, está ahora en 70 por ciento; más los impuestos y tributos que se aplican en las facturas", se quejó.

"Nosotros vamos a decir la verdad, a informar lo que pasa, no como otros que prefieren quedarse callados, no decir nada", sostuvo Ciapponi. (Télam)