La diputada nacional del bloque Cambiemos, Samanta Acerenza, aseguró en una entrevista con un medio gráfico que “cuando se recibió el gobierno bonaerense había una única caja con la cual el gobernador pagaba primero los sueldos estatales y con lo que quedaba se hacían las obras que pedían los intendentes de mayor afinidad política”.
En torno a esto, agregó que cuando María Eugenia Vidal asumió su cargo “definió una política de descentralización, porque los municipios tienen que recibir una cantidad de plata para hacer obras sin distinción partidaria”.
“Las obras no tienen que ser una cuestión de amiguismo, y los hechos muestran que hoy hay obra pública provincial en todos los municipios. Hay un interés, de parte de la gobernadora, que los intendentes, sean de Cambiemos o de la oposición, tengan los recursos para trabajar y solucionarle los problemas a la gente”, subrayó.
Por otro lado, la legisladora expresó que “hay un usufructo de la oposición, que quiere establecer que las marchas y los paros son una señal de ingobernabilidad a nivel nacional y provincial, pero la gente en la calle dice otra cosa, nos piden que no aflojemos y nos acompañan en las batallas que estamos dando".
“La gente, en el momento de elegir, va a entender por qué estamos dando estas peleas”, finalizó